sábado, 24 de julio de 2010

50 CUALIDADES DEL LÍDER Y EVANGELIZADOR SEGÚN SAN PABLO

Introducción


Mc 3, 13 ss.: “Subió al monte y llamó a los que Él quiso...”. Esta es la vocación de los 12. Nosotros, por la participación del sacerdocio común de los bautizados, participamos de este llamado.
En este texto vemos un doble llamado: “...para estar con Él” y “...para enviarlos a predicar”. Esta última es la misión que tiene como evangelizadores. Los que han estado con Él, ahora lo van a anunciar.
¿Por qué elegimos a Pablo? Porque él tenía claro 3 cosas:
El contenido de la evangelización: 2 Cor 4, 5; cfr. Santo Domingo 27: dar a Cristo como lo dio María. Dar al mundo la posibilidad de ser redimido. Es un acto de amor y el mejor servicio que podemos dar a los que están a nuestro lado. Es mostrar el camino en vez de gritar que estamos perdidos. Es tomar de la mano y poner al hombre de pie, con poder. Si no lo hacemos, privamos al mundo de su única esperanza. Cuando una sabe que lo que lleva es bueno, hay ganas de darlo.
La evangelización es una obra de todos: no es gloria para nadie. 1 Cor 9, 4-16. El Evangelio es algo que me incumbe y ¡ay de mí si no evangelizo! Ejemplo: se está hundiendo un barco y a uno de los pasajeros no le importa porque el barco no es suyo. Tenemos que afrontar el desafío que hay al comienzo del 3° Milenio: la confusión religiosa. Al terminar el 1° Milenio había dos iglesias: la católica y la ortodoxa. Al terminar el 2° Milenio: el pecado de ruptura de la Iglesia (leer Tertio Millenio Adveniente 31). Ya no se pueden contar el número de iglesias. Encima hay corrientes que no son cristianas. En Europa, la confusión es entre el cristianismo y el Islam; en América, entre católicos y protestantes. Con la velocidad con que chasqueamos los dedos, se va un católico de la Iglesia (hacer chasquear los dedos).
La evangelización es un obra encomendada: 1 Cor 9, 17. Somos enviados por el bautismo y la confirmación. No hacemos algo por propia iniciativa. Recordemos el episodio de Ananías (Hch 9, 17). No quería ir pero fue mandado por el Señor. Rm 10, 14ss.: En toda predicación tiene que haber un envío. Es la Iglesia quien me envía.


Vamos a estudiar 50 cualidades de San Pablo según su vida en Hch. Para motivarlos voy a empezar por el final: Hch 28, 30-31: “Predicaba con valentía y sin estorbo alguno”. Este es el final de la historia. Los estorbos vinieron antes.
Comencemos, pues, a analizar las cualidades:


Cualidad n° 1
Saulo se deja guiar: Hch 9, 3-9.
El Señor lo dejó ciego para que se dejara guiar. En la Iglesia no sirve tener experiencia sino docilidad.


Cualidad n° 2
Contuvo el ímpetu del comienzo. Aprendió a ser prudente: Hch 9, 19-25.
Empezó demasiado pronto y casi pierde la vida. Aprendió a protegerse en la comunidad. Los hermanos lo salvaron. La prudencia se logra si estoy apoyado por los hermanos de la comunidad. Hay que respetar el “canasto” de la comunidad. No vayas solo; te van a matar. Se muere el ímpetu inicial. Lo primero que necesitas es una comunidad. Cuando el enemigo te cierre las puertas, ellos te van a acoger.


Cualidad n° 3
Aprendió a pasar las pruebas de acoplamiento. Superó el rechazo: Hch 9, 26-29.
A Pablo lo había catequizado Ananías (discípulo de 2°); en Jerusalén estaban los buenos (apóstoles), pero no le abrieron las puertas. Le tenían miedo ya que él había empezado con la persecución.
Los evangelizadores deben soportar el rechazo. Eso es el acoplamiento. Si no estoy dispuesto a esto, no puedo seguir adelante.
En ese grupo estaba Bernabé.


Cualidad n° 4
El fin del principio: Hch 9, 29-31. Lo mandaron a Tarso. En cuanto se fue, la Iglesia gozó de paz. ¡Qué momento para Saulo!
Momento de desaliento. ¡Cuántos servidores están en sus casas y encima le dicen que el grupo, sin él anda bien!
Después de esto, Hch habla de Pedro (se acabó Saulo). Y aún no había hecho nada relevante y ya está en su casa.
Hay muchos que recién empiezan y dan por terminada su obra. Se quedó de 3 a 7 años en Tarso.
¿Cómo es que volvió? Los llamados de Dios son irrevocables.


Cualidad n° 5
Saulo regresa para continuar con la evangelización: Hch 11, 19-26.
Bernabé sabe que no puede guiar la Iglesia de Antioquía y va en busca de Saulo. Saulo supera el desaliento. Tuvo fuerzas para volver a empezar.


Cualidad n° 6
Saulo es el más humilde en la escuela de Bernabé: Hch 11, 27-12, 25.
Bernabé representa a la Iglesia de Antioquía y Saulo era su ayudante. Llevaron víveres a Jerusalén. Así comienzan los grandes ministerios: siendo ayudantes.
Hay gente que quiere empezar por ser líderes y no tienen la capacidad de ser líderes. Antes de predicar guió carretas hacia Jerusalén.


Cualidad n° 7
Es puesto en el equipo de maestros: Hch 13, 1.
Empieza a ascender aunque todavía es el último . El orden de la Biblia es importante. Era el último pero ya era maestro.


Cualidad n° 8
El Espíritu Santo lo elige y la comunidad lo envía: Hch 13, 2-5).
El Espíritu Santo dijo “YA”. Saulo tendrá conciencia de que es enviado. No sólo por el Espíritu sino también por la comunidad. También se siente enviado por la comunidad.


Cualidad n° 9
Pasa a ser protagonista de la misión: Hch 13, 6-13.
Es la primera vez que le dicen “Pablo”. Bernabé pasa a ser compañero de Pablo. El que se dejó guiar, ahora va a guiar. El que se quedó ciego ahora tiene autoridad para enceguecer. Para llegar a esto pasaron 14 años.
El Señor te va a confirmar para qué te ha llamado pero hay que esperar el YA del Espíritu.
Cualidad n° 10
Como Jesús, es blanco de rechazo: Hch 13, 44-51/ 14, 1-7.
Unos van a decir que eres una maravilla y otros que eres una porquería. Nuestra historia es como la de la Iglesia: con luces y sombras.


Cualidad n° 11
Pablo rompe con la idolatría: Hch 14, 8-18.
La gente es fanática, pero el líder, cuando reconoce los dones que tiene, ubica a la gente. Nosotros no hacemos milagros. Somos seres humanos y a veces nos cuesta más que a otros. Dios es la fuente de lo que somos y hacemos. Lo claro al hacer el segundo milagro (deja ciego/cura al tullido).
Los líderes no podemos permitir que nos idolatren. La Iglesia tiene su propia estructura y no es alrededor del líder. Nuestros dones están al servicio de la comunidad eclesial.


Cualidad n° 12
El otro extremo: la gente se decepciona y te rechaza. Pablo supera el rechazo y sigue evangelizando: Hch 14, 19-20.
Pablo no se deja llevar por las alabanzas ni queda sepultado en las piedras.


Cualidad n° 13
Pablo líder, levanta a otros líderes: Hch 14, 21-25.
Designó presbíteros y los deja encargados de continuar la obra de evangelización. La comunidad se forma en torno a la Eucaristía. Si no llevamos a la gente a la Eucaristía, la evangelización queda truncada.
La evangelización implica la Eucaristía y la Eucaristía implica los presbíteros. A nosotros no nos toca designar a los presbíteros pero sí llevar a la gente a los sacramentos y rezar para que haya presbíteros.


Cualidad n° 14
Regresa a su comunidad y la hace partícipe de su misión: Hch 14, 26-28/15, 35.
Nunca perdió la memoria de quien lo había enviado. No se olvida de su comunidad. Comparte las alegrías de su ministerio y también los problemas. Nunca digas que eres maestro. Eres maestro para algo y alumno para otras cosas.


Cualidad n° 15
Sabe mantener la comunión: Hch 15.
Surgen problemas en la comunidad. Envían a Bernabé y Pablo para que discutan con los Apóstoles. Hch presente el discurso de Pedro, Santiago y luego la decisión de los Apóstoles. Leen con alegría la carta y siguen trabajando.
Gal 2 expresa el deseo de estar en comunión (v. 1-2. 9). Una de las exigencias del líder es la COMUNIÓN. Estar de la mano con el Magisterio de la Iglesia. Siempre hay una instancia superior a quien acudir. Acata las órdenes de los Apóstoles y su discernimiento. Tiene comunión con la jerarquía.
Como líderes no podemos enseñar lo que a nosotros se nos ocurra. Hay que leer los documentos que tal vez no sea lo que vayas a predicar pero son un marco de referencia.
Pablo no contó las discusiones. Al pueblo le llega el ánimo positivo de la conclusión. No predicamos los problemas que hay adentro sino lo positivo. Por ser dirigente, estarás en contacto con las discusiones. Mantener la comunión es guardar sigilo.
Pablo participa de la discusión y lleva la conclusión positiva.




Cualidad n° 16
La unidad no es uniformidad: Hch 16, 36-41.
Se separan Pablo y Bernabé por culpa de Marcos. Pablo elige a Silas y Bernabé se va con Marcos a Chipre.
Reconocen que tienen métodos pastorales diferentes. Bernabé era paciente; Pablo, no. Hay en la Iglesia diversidad de dones y carismas. Se acentúan cosas diferentes pero en el fondo estamos en lo mismo.
Hay veces que no nos ponemos de acuerdo pero nos respetamos.


Cualidad n° 17
Pablo es un hombre que respeta la religiosidad popular: Hch 16, 1.
Circuncidó a Timoteo. Pablo estaba en contra de la circuncisión pero a Timoteo lo circuncida (cfr. Gal).
Hch 18, 18: hizo voto de nazir y se cortó el pelo.
Hch 21, 17-26: rito de purificación.
No se puede despreciar la tradición religiosa del pueblo. Podemos evangelizar la tradición popular. Si se desprecia, la gente que cree en eso no te va a escuchar. Siempre habló bien de la Ley pero fue claro que la Ley no salva.


Cualidad n° 18
Se deja guiar por el Espíritu. No va donde quiere sino donde el Señor lo lleva: Hch 16, 6-10.
El Espíritu Santo lo mandó a Macedonia. Más o menos caminó 1000 kilómetros. A Pablo, Dios le habla por visiones, sueños y acontecimientos.
A nosotros el Espíritu nos indica por dónde, a través de la solicitud de la Iglesia. Hay que responder a las necesidades y no crear necesidades. No abandones tu trabajo. Ora para que te llamen.
Cuando no haces lo que querés, estás más cerca de cumplir con la voluntad de Dios.


Cualidad n° 19
Se contenta con los logros aunque sean pequeños: Hch 16, 13-15.
La única persona que se convirtió en Filipos fue Lidia y luego el carcelero: Hch 16, 29-31.
Hch 17, 32-34: predica en el Aerópago de Atenas y sólo se convirtió Damaris y Dionisio.
Después allí nace una comunidad. Pablo le escribe una carta y es una comunidad que lo ayuda en la evangelización.
Dios va a hacer grandes cosas de lo pequeño que hagas.


Cualidad n° 20
Pablo tiene un gran discernimiento: Hch 16, 16-18.
La joven grita cosas ciertas y buenas. Era bueno pero no adecuado: no los dejaba hablar. Hay cosas que son buenas pero no tienen un buen origen. Es inoportuno. Hay que discernir de dónde vienen. La motivación es lo que debemos discernir.


Cualidad n° 21
Enfrenta las dificultades con alegrías: Hch 16, 19-25.
Lo metieron en el calabozo. Pablo oraba y cantaba himnos. Así hacía cuando tenía un dificultad. “Los cristianos tragamos amargo y eructamos dulce”.
Antes de estar en la Iglesia no tenía problemas. Ahora estoy en esto y los tengo.








Cualidad n° 22
Aprovecha todas las circunstancias para evangelizar: Hch 16, 25-34.
Hay que tener habilidad. Los mejores aprendizajes son los que aprovechan el momento. Hay momentos que no se van a volver a repetir.


Cualidad n° 23
Reclama sus derechos: Hch 16, 35-40/22, 22-29/25, 10-12.
Esgrimía su ciudadanía romana. Ser cristiano no es dejarse atropellar. Merecemos ser respetados. No somos gente que se amedrenta.


Cualidad n° 24
Es un gran fermento. Crea cambios. Donde quiera que pasa, revoluciona todo. Es levadura: Hch 17, 6-8: “Han revolucionado el mundo”. (Ya estamos en Tesalónica).
Creamos inquietud. Si nos hay cuestionamiento...; si no hay interpelación...; si no hay pelea...


Cualidad n° 25
Una gran lección Hch 17, 16ss.: tiene capacidad de diálogo y análisis de la realidad.
Tiene una enorme capacidad de observar y dialogar con todos (idólatras, monoteístas, epicúreos y estoicos). Hay que saber hablar con unos y con otros. Hay que tener en cuenta con quién estás hablando y qué dices (Hch 21, 37).
Hay que fijarse bien dónde se está parado. Ejemplo de la farmacia: tiene tos y le das un purgante. Hay gente que busca consuelo y nosotros le damos duro. Hay que adecuarse al auditorio.


Cualidad n° 26
Encuentra la puerta para evangelizar, no para condenar sino para salvar: Hch 17, 22 (captatio benevolentiae).
No hay que llegar golpeando sino evangelizando. Usar leguaje positivo. No vamos a crear cambios en las personas acentuando sus defectos. Sólo es cuestión de saber entrar.
Pablo supo contener la indignación y supo entrar.


Cualidad n° 27
Se revela el Pablo humano, compañero de trabajo, amigo, solidario: Hch 18, 1-5.
Se encontró con un matrimonio de judíos refugiados: Áquilia y Priscila. Vivió y trabajo con ellos. No discutía; sólo hacía eso en la sinagoga.
Los buenos evangelizadores hacen bien sus responsabilidades humanas. Trabajando, así los evangelizó. Les manda saludos en Rm 16, 3 y en 2Tm 4, 19.
El apostolado no es refugio para los fracasados. La primera responsabilidad de los laicos es proveer a la casa. De lo contrario, tu familia despreciará tu apostolado. El amor de un padre o de una madre no se deja en segundo lugar. No sirve decir “Hoy no hay comida porque hay retiro”.
Hay que ser gente capaz; no apocados ni fracasados.


Cualidad n° 28
Siente el consuelo de Dios: Hch 18, 6-11.
En los momentos difíciles el Señor lo consolaba.
Tuvo problemas en la sinagoga. Por la noche lo consoló el Señor.
Hch 23, 11: palabras de consuelo: ánimo para dar testimonio en Roma.
Hch 27, 22: “Ánimo ¡No temas!”
El Señor se lo decía en los momentos más difíciles. La Iglesia se mueve entre las tribulaciones del mundo y el consuelo de Dios.
Cualidad n° 29
No se mueve por el entusiasmo propio sino por el Señor: Hch 18, 19-23.
Es la primera vez que le dicen en una sinagoga que se quede. Pablo dijo no. Hch 19, 8-10: todo lo contrario. Uno tiene que aprender a discernir.
Cuando te quedas rodeado por los que te quieren, no creces.
Es bueno tener una piedrecita. Hay que aceptar los distintos puntos de vistas. Como el obispo que pregunta la hora en el convento y la madre superiora le dice: “La que Ud. Quiera”. Es bueno oír a los que no piensan como tú.


Cualidad n° 30
No se conforma. Trata que la obra alcance su plenitud: Hch 19, 1-7.
Eran pocos hombres los que empezaron con esta aventura del Evangelio: Doce. Pablo les completa la evangelización. Lleva la obra a perfección. No hay que quedarse en la conversión del principio.
Hay que hacer preguntas que inquieten y que hagan ver que aún hay más. Hay que llevar a los hermanos más adelante. Hay gente que le huye al crecimiento. No queremos sólo cristianos convertidos sino formados.
Hay que ponerse a estudiar. Desde donde llegamos, vamos para adelante.


Cualidad n° 31
Actúa con el poder de Dios: Hch 19, 11-16.
Otros tratan de imitarlo. Los evangelizadores no se hacen imitando a otros. Pablo tiene el respaldo de Dios. Tú tienes tu propio carisma. Puedes inspirarte en otros pero tienes que ser tú mismo.
“Bienaventurados los que nos imitan porque están condenados a cometer nuestros mismos errores”. Los líderes son genuinos. Sí hay modelos pero no se trata de reproducir. La única imagen que debemos reproducir es la de Cristo.
Cuando uno no tiene el respaldo del Señor se sale lleno de heridas.


Cualidad n° 32
Es prudente. No se arriesga inútilmente. Escucha el consejo de sus amigos. No busca más peligros que los que tiene: Hch 19, 29-31.
Hch 20, 1: cuando se calmó se fue.
Vivimos en un mundo donde, sin querer tocamos intereses de otras personas. Todo mensaje cristiano afecta a alguien. Ya hay peligro en lo que hacemos. No busques más peligros. Si hablas de Cristo, seguro que habrá alguno que te ponga la mano encima.


Cualidad n° 33
Pablo interrumpe su discurso para bajar a abrazar a Eutico: Hch 20, 7-12.
Pablo estaba presidiendo la Eucaristía. Estaba haciendo algo muy importante pero aquel joven caído necesitaba atención.
Muchas veces, por hacer cosas importantes no somos solidarios (como el levita del buen samaritano). Es importante acercarnos al que más nos necesita. Acercarse, abrazarlo y decirle que está vivo.
Yo sé que el culto es importante. Pero no se quede sólo con ir a misa; vaya a buscar a otro que ya no viene.
(Interrumpir para abrazar)
“Bajar”: acercarse al hermano no es bajar. Geográficamente Pablo tuvo que bajar. Si hay alguien que disfrute de tu abrazo, para y abrázale.




Cualidad n°34
Pablo es modelo de pastor y quiere que los demás sigan su ejemplo. Él quiere que otros lleguen a ser como él: Hch 20, 17-35.
Él ha sido modelo. No se avergüenza de haber sido ejemplo.
Primero les habla de él. En el versículo 28 les da consejo: “Ahora les toca a Uds.” Es importante explicar a los que van a ocupar nuestros lugares. Los cargos no son eternos. Trata que los que vienen atrás sean mejores que tú.
Hay líderes a los que les gusta que cuando ellos ya no están las cosas anden mal: “Ya no es como cuando estabas vos”.
El líder nunca deja un vacío. Siempre hay que enseñar a otros a que hagan lo que yo estoy haciendo. ¡Ojo! Que no somos pilares de la Iglesia. Ejemplo: el manto de Elías a Eliseo.


Cualidad n° 35
Pablo también advierte de los peligros. No engaña a nadie: Hch: 20, 29-32.
Va a haber problemas adentro y afuera. Trabajar en la Iglesia tiene sus dificultades. Aún no hemos llegado a cielo. Las comunidades no son el cielo. No vamos a encontrar gente santa. “En el arca de Noé hay todo tipo de animales” y en nuestras comunidades todo tipo de personas. Hay líderes que piensan que ser servidores es lindo. Cuando estás al frente de una comunidad conocés más tus debilidades que tus fortalezas.
¿Querés perder amigos? Dirigí un grupo. Los líderes son impopulares porque tienen que estar en contacto con los defectos de los otros.
Esta es la Iglesia militante, por eso aquí hay trabajo. Los que no quieran problemas y trabajar; o sea, la Iglesia triunfante, que se mueran.
Hay problemas pero hay que encomendarse a la gracia de Dios.


Cualidad n° 36
Pablo se deja querer: Hch 20, 36-38.
No rechaza las muestras de cariño.
A veces perdemos la capacidad de dejarnos querer. A veces, por una falsa humildad no aceptamos las palabras de aliento. Siempre el Señor nos mostrará un aguijón.
El líder no debe ser refractario de las muestras de cariño.


Cualidad n° 37
No teme. Está dispuesto a dar la vida por Cristo: Hch 21, 4-5. 10-14.
Los hermanos trataban de convencerlo pero Pablo no se deja convencer.
La OPCIÓN FUNDAMENTAL: “Yo quiero vivir y morir por el Señor”. Parece que Pablo va en contra del Espíritu Santo (los consejos están inspirados por el Espíritu Santo).
A veces uno encuentra excusas para no morir por el Señor. Pídale al Señor que le ponga esa convicción.
En todo lo que hagamos hay que seguir la opción de la conciencia porque Dios te va a juzgar por lo que hay en tu conciencia.


Cualidad n° 38
Acepta la corrección y hace lo que se le pide para enmendar el daño que ha causado: Hch 21, 17-26.
Él cuenta todo lo lindo que le pasó pero en Jerusalén le dijeron que se oían otras cosas. Pablo no tenía porqué hacer eso pero lo hizo.
A veces tenemos toda la razón pero nada de humildad.
Hace todo lo necesario para que los demás se sientan desagraviados.
A los líderes nos cuesta pedir perdón. Cuando nos hacemos aptos para reconocer nuestros errores, los demás se hacen aptos para reconocer los errores de ellos. Los líderes son falibles. Tenemos miedo de perder autoridad. Da alguna vez el brazo a torcer.


Cualidad n° 39
Es calumniado. Le acusan de algo que no ha hecho porque no siempre queda bien con todos: Hch 21, 27.
Siempre habrá sectores que no queden conformes. La gente sólo mira una cosita pero imagina un montón.
La gente nos quiere impecables. Por eso hay que tener mucho cuidado aún sabiendo que la gente siempre va a hablar mal porque no conoce el fondo de tus decisiones.


Cualidad n° 40
Nunca olvida su comienzo. Esto es bueno para aquellos que han adquirido experiencia: Hch 22, 4ss.
Habían pasado, por lo menos, 20 años y lo describe como si fuese el primer día. El mismo discurso Hch 26, 9-15.
Es bonito recordar de dónde te saco el Señor. Eso es bueno para comprender a los otros. A veces uno ha crecido y quiere que los demás piensen como uno. No midas a los demás con la estatura que ahora tienes.


Cualidad n° 41
Es hábil. Conoce bien lo que piensan sus enemigos: Hch 23, 6-10.
Muchos enemigos de la Iglesia estudian bien los puntos de nuestra doctrina para ver por dónde pueden atacarnos. Muchos católicos ni siquiera conocen la doctrina de la Iglesia. Los enemigos conocen más la doctrina que nosotros. Es necesario conocer la doctrina.


Cualidad n° 42
Dios lo protege. Lo libra siempre de la mano de sus enemigos. Morirá no cuando sus enemigos quieran sino cuando Dios quiera. Hch 23, 12-22.
Todo el ejército romano para que no lo mataran. Pablo no era importante para el Imperio Romano. Pero el Espíritu pondrá todo para salvarnos.
Los evangelizadores debemos estar tranquilos. El Espíritu Santo pone toda la protección sobre sus siervos.


Cualidad n° 43
Pablo no traiciona el mensaje. Habla de los temas fundamentales aún en los momentos en los que podría librarse: Hch 24, 24.
Dos años hablando con Félix. Félix quería dinero y Pablo le ofrecía salvación y vida eterna. Nunca le tocaba el tema que él quería. Por eso le permitía muchas visitas pensando que le traerían dinero para la fianza.
Hay gente que quiere que se hable de lo que ellos quieren. No hay peor cosa que empezar a hablar por recomendaciones. Los pastores te pueden dar una orientación pero los evangelizadores no debemos traicionar la verdad.


Cualidad n° 44
Todos reconocen la capacidad de Pablo, su instrucción. Sus propios enemigos lo elogian aún cuando creen que lo están insultando: Hch 26, 24-32.
Dijeron que era muy preparado, con erudición bíblica. Nosotros no hablamos para que reconozcan nuestra elocuencia pero no tienen que pensar que somos charlatanes.
Cuando habla un laico es más examinado. Los curas podemos decir lo que queramos pero los laicos son más juzgados. Debemos reflejar que tenemos instrucción; no debemos reflejar ignorancia.


Cualidad n° 45
Hch 27, 9: Al comienzo no lo escuchan; al final todos quieren escucharlo. Él no es rencoroso y no se acuerda del rechazo del principio (vv. 21. 42)
El v. 11 es contrario al v. 43. El centurión cambió de actitud. Pablo siempre se mantenía dispuesto a ayudar a los demás.
Pablo actúa como deberíamos actuar los cristianos en esta sociedad que va a la deriva.


Cualidad n° 46
Pablo está en el barco orando, intercediendo y dando esperanza. Esa es la actitud del cristiano en el mundo actual: Hch 27, 21-26.
Iban 276 (v.36) Sólo Pablo iba orando. Tal vez los grupos no valoran la intercesión que hacemos los líderes. No le dan importancia a nuestros trabajos. No vamos a ser noticia.
Todos los evangelizadores estamos llamados a orar y dar palabras de esperanza porque todas nuestras comunidades están en medio de una tormenta, como en ese barco.


Cualidad n° 47
Pablo reconoce que todos somos importantes; que todos necesitamos de todos: Hch 27, 30-32.
Él toma en cuenta a los marineros aún cuando ellos no supieron qué hacer en la tormenta. En vez de acusarlos como cobardes les dice que son importantes.
Los líderes deben hacer sentir a los demás que son importantes.


Cualidad n° 48
Pablo tiene mejores soluciones. Hch 27, 42: solución de los marineros (poco originales) Los soldados debían pagar con la condena del preso que se les escapaba. V.43: solución de Pablo: comer para nadar. Celebró la Eucaristía en el barco. Alimentarse. Recobrar fuerzas. Salvar vidas.
En la sociedad habrá siempre gente que piense que la solución es matar. Ejemplo de la multiplicación de los panes. En vez de multiplicar los panes, eliminemos las bocas. Jesús hizo al revés.
Hay que conseguir soluciones originales (Cfr. Santo Domingo) para los problemas de la sociedad.


Cualidad n° 49
Hch 28 Testimonio final que resume la vida de Pablo: para que los demás puedan lograr lo que él ha logrado. Lo da de una manera especial para que los demás puedan entender lo que Dios ha hecho en él y puede hacer en ellos.
Hch 28, 1-10: “logró sacudirse la serpiente”.
En este episodio podemos resumir la vida de Pablo: 1° pensaron que era un asesino y que fue víctima de la justicia divina (víbora)
Esperaban que muriera. La gente espera que nosotros volvamos a ser como antes; que en nosotros se vea el veneno de la serpiente, del pecado. Y quieren ver en qué momento dejamos. “El lobo cambió de pelo pero no de dientes”.
Después, como no le pasó nada, la gente se fue al otro extremo; pensaba que era Dios.
Todos tenemos un momento en que la serpiente ataca pero el Señor te da su gracia.
3 manos: a- con la serpiente; b- sacudiendo la serpiente; c- imponiendo las manos, sanando.
Así como Dios me libró a mí y me dio la fuerza para vencer y me usó, así Dios quiere hacer con ustedes.
Hay que distinguir en qué momento de la vida me encuentro.


Cualidad n° 50
Pablo nos da la gran lección.
Hch 28, 30: Pablo liberado y sobreseído. Esto fue alrededor del años 61/63. En el año 67 vuelve a ser apresado y ese cautiverio termina con su vida. Lo decapitan.
El último testimonio es su testamento que ya no lo recoge Hch sino 2Tm 4, 6-18.
Perdió la capa pero no perdió la fe.
“He conservado la fe”: perseverancia final.
Lo dio todo por el Reino. Murió sin honores. Sólo estaba Lucas. Pablo pide que venga Marcos. Pablo se siente sólo.
“Le aguarda la corona”: en fe pero humanamente termina solo.
Muchos vamos a perder la vida. Se nos quitarán los títulos.
Al final todos somos andamios que se usan para construir un edificio. Cuando se está en construcción, lo que se ve son los andamios. Cuando está terminado los andamios desaparecen.
Ustedes y yo somos andamios. Estamos construyendo el Reino. Lo que va a quedar es el edificio de Dios.
Como los misioneros que evangelizaron América. 14.000 españoles. Nadie se acuerda de sus nombres.
Tal vez, alguien, en la historia, se acuerde de nosotros. Pero lo más importante es que conserven la fe y que el Señor nos invite a compartir el banquete eterno.
“Señor, que nos falte todo, menos tú”.


Orar por nosotros
Orar por el hermano de al lado
Darse la paz.

1 comentario: