miércoles, 21 de julio de 2010

¿Por qué un Dios bueno permite el sufrimiento?

Dios dice en su Palabra en la epístola a los Romanos 8:35 ¿Quién nos apartará del amor de Cristo? Tribulación? ó angustia? ó persecución ó hambre ó desnudez? ó peligro? ó cuchillo?
No podemos pretender que tendremos una respuesta completa al porqué Dios permite el sufrimiento, como tampoco exigir entender las razones ya que son variadas y complejas.
Es el caso del siervo Job, luego que Salió de sus aflicciones como leemos en Job 42: 3 que dice: “¿Quién es el que obscurece el consejo sin ciencia? Por tanto yo denunciaba lo que no entendía, cosas que me eran ocultas y que no las sabía.”.Job se dio cuenta de que no podía exigir una respuesta de parte de Dios, amén de lo sucedido.
Consideremos que los sucesos de la vida son difíciles de entender y muchas veces las respuestas parecen tan lejanas que están fuera de nuestro alcance.
Continuando con Job, que fue un hombre que vivió hace más de 4.000 años con una vida de etapas tormentosas, suplicó como leemos en el libro de Job 10: 2-3 “ Diré a Dios : no me condenes; Hazme entender porqué pleiteas conmigo; ¿Parécete bien que oprimas, que deseches la obra de tus manos y que resplandezcas sobre el consejo de los impíos?”
Cuando Ud. está pasando por una situación difícil, de prueba, de dolor, de angustia, de ansiedad, etc. que le provoca sufrimientos ¿No se ha preguntado ¿Porqué a mí? ¿por qué no los otros?, ¿No dicen que Dios es amor?, ¿Acaso Dios me odia? ¿Porqué sufro tanto?.
Ud debe saber que Aquel que nos ama tanto, es a saber, nuestro Señor, nos da las respuestas que necesitamos para confiar y amar a Dios que es nuestro Padre y que en nuestro dolor nos ayuda y nos pide que nos acerquemos a El.
En estos momentos tal vez Ud. necesite un abrazo amistoso, alguien que le escuche o alguien que se siente con Ud, en silencio; pero sin lugar a dudas lo que más necesitará es el consuelo de las verdades de la Palabra de Dios, la Biblia, que lo ayuden a ver su situación particular desde la perspectiva de Dios para que su fe en El permanezca firme o que pueda crecer sin importar que los sucesos de su vida sean adversos.
Ante tantas interrogantes que nos pudiéramos hacer frente al dolor; las Escrituras nos entrega variadas respuestas que veremos en algunos contextos.
Primero, nuestro buen Dios permite el dolor y el sufrimiento en el mundo para alertarnos al problema del pecado, en segundo lugar para dirigirnos a responderle en fe y en esperanza, en tercer lugar para moldearnos, de manera que seamos más semejantes a Cristo, y en cuarto lugar para unirnos de forma que nos ayudemos mutuamente.
Analicemos brevemente este tópico en el primer contexto. ¿Se imagina Ud. un mundo sin dolor? ¿Suena para Ud. atractivo? El dolor nos advierte cuando algo no anda bien. El dolor es un síntoma que se hace notar cuando una parte del cuerpo está en peligro.
Hoy Dios nos está alertando que algo anda mal en el mundo. La condición de nuestro planeta es triste. El sufrimiento no discrimina a las personas, ni por su condición social, ni por su raza, religión etc. Los sucesos son para todos, sean personas buenas o malas, chicos o grandes. ¿Parece injusto? Hay personas que sufren sin que aparentemente hayan tenido culpa de ese sufrimiento; un accidente o enfermedad catastrófica, muertes de familiares o amigos, una separación matrimonial, guerras; recodemos lo que está sucediendo hoy con las guerras en el Medio Oriente. Debemos decir que las malas decisiones del hombre, Adán y Eva, destruyeron su propia tranquilidad.
El primer libro de la Biblia; Génesis capítulo 3, relata como la muerte física y espiritual se hicieron parte de la existencia humana” Con dolor parirás los hijos, dijo Dios a Eva; En el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, dijo Dios a Adán. La tierra fue maldita con cardos, que harían difícil el trabajo del hombre. Adán y Eva fueron expulsados del paraíso, destruyendo la hermosa relación con Dios.
Hoy el mundo no es aquello para lo que Dios lo creó, por lo tanto la primera respuesta a que ¿Porqué un Dios bondadoso y bueno permite el sufrimiento es que es el resultado directo de la entrada del pecado al mundo.
Sin embargo Dios nos está alertando que algo anda mal con sus criaturas. Las personas pueden causar sufrimiento a otras personas.
Las malas decisiones que tomamos en la vida afectan indudablemente a otras personas. Génesis 37: 12-36 nos muestra que los hermanos de José lo vendieron como esclavo. Mateo 2:16-18 señala que el rey Herodes eliminó a todos los bebés que vivían en Belén en un intento por matar a Jesús.
Satanás y sus demonios también pueden causar sufrimientos, como sucedió con Job que siendo una buena persona, siervo de Dios, sufrió una tragedia increíble, Dios permitió a Satanás que tomase sus posesiones, su familia, su salud, pero no su vida como lo relata el libro de Job en los capítulos 1 y 2. Job se mantuvo íntegro a pesar de las circunstancias y comprendió que Dios no estaba siendo injusto porque Dios es digno de confianza.
Pero Dios también nos está alertando a través del sufrimiento que algo anda mal en mí, en Ud. Pensamos inmediatamente que Dios nos está castigando por algún pecado y eso no es cierto, pues gran parte de nuestro sufrimiento se debe a que vivimos en un mundo imperfecto y habitado por personas imperfectas. Hay situaciones de sufrimiento que sí son consecuencias directas del pecado ya se trate de un castigo correctivo de parte de Dios hacia los que ama o de un acto punitivo de Dios a los rebeldes del universo. En la Epístola del Apóstol Pablo a Los Hebreos 12: 5-8, dice: “Y estáis ya olvidados de la exhortación que como con hijos habla con vosotros, diciendo: Hijo mío, no desprecies el castigo del Señor, Ni desmayes cuando eres de El reprendido, Porque el Señor al que ama castiga, Y azota a cualquiera que recibe por hijo. Si sufrís el castigo, Dios se os presenta como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no castiga? Mas si estáis fuera del castigo, del cual todos han sido hechos participantes, luego sois bastardos y no hijos:”
La pregunta ahora es ¿Cree Ud. que Jesús es el Hijo de Dios y por lo tanto Salvador de su vida?. Si Ud. ha depositado su confianza en Jesucristo y en su obra redentora en la cruz del calvario entonces es un hijo de Dios, es de la familia de Dios cuya cabeza es Jesucristo, tenemos entonces un Padre que nos entrena y nos corrige y hay otra respuesta al porqué un Dios bueno permite el sufrimiento; algo anda mal no sólo en el mundo sino que en la humanidad, en Ud. y en mí.
¿A quién acude Ud cuando tiene dificultades? Dios permite el sufrimiento y los problemas para ayudarnos a encontrar las soluciones. Las soluciones las encontramos en El. El sufrimiento puede producir una dependencia saludable de Dios como dice el Apóstol Pablo en 1ª a los Corintios 1: 8-9 “ Porque hermanos, no queremos que ignoréis de nuestra tribulación que nos fue hecha en Asia; que sobremanera fuimos cargados sobre nuestras fuerzas de tal manera que estuviéramos en duda de la vida. Mas nosotros tuvimos en nosotros mismos respuesta de muerte, para que no confiemos en nosotros mismos, sino en Dios, que levanta los muertos.”
El sufrimiento muestra que somos débiles, nos obliga a evaluar la dirección de nuestras vidas, nos obliga a ver más allá de nuestras circunstancias inmediatas, nos lleva a hacernos grandes preguntas, como, ¿ Cuál es el propósito de mi vida?.
Las respuestas están en la Biblia, la Palabra de Dios, porque sabemos que esta vida presente no es todo.
Romanos 8:18 dice: “Porque tengo por cierto que lo que en este tiempo se padece, no es de comparar con la gloria venidera que en nosotros ha de ser manifestada” Aquí nos encontramos con otra respuesta pues Dios usa el sufrimiento para dirigirnos a El es decir nos llama a confiar y a tener esperanza en El.
En otro de los contextos veremos que Dios permite el sufrimiento para moldearnos. Dios dice en su Palabra en el libro de Romanos 5: 3-4 “ Y no sólo esto, mas aún nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; Y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza.” El muestra los beneficios del sufrimiento, nos dice que nos debemos alegrar por lo que Dios puede hacer y hará por nosotros y para su gloria a través de nuestras pruebas. Dios puede usar los problemas de la vida para moldearnos de manera que crezcamos en la fe, que seamos más semejantes a Cristo. ¿Cómo responde Ud. a las dificultades de la vida? ¿ Ha crecido su fe en Dios?, ¿ Se ha alejado más de Dios? O ¿Ha recurrido a otras prácticas?. Si Ud ha confiado en Dios, téngalo por seguro que esas pruebas obran para bien. Romanos 8:28 dice.”Y sabemos que a los que a Dios aman, todas las cosas les ayudan a bien, es a saber, a los que conforme al propósito son llamados.”
No olvide que Dios usa todas las cosas de la vida para que nos desarrollemos espiritualmente y para que seamos semejantes a Cristo como también para avanzar en su plan eterno; aquí llegamos a otra respuesta a nuestra gran interrogante: Como Dios soberano del universo, quiere usarnos para ayudar a otros y que otras personas también nos ayuden a nosotros, como decía anteriormente, con el fin de desarrollar nuestra madurez espiritual, ya que el dolor y el sufrimiento nos muestran cuanto nos necesitamos los unos a los otros.
Cuando los problemas parecen agotarnos, podemos descansar en otros creyentes para que nos ayuden a renovar la fortaleza en el poder del Señor, la primera Epístola del Apóstol Pablo a los Corintios 12: 26-27, dice: “De manera que si un miembro padece, todos los miembros a una se duelen, y si un miembro es honrado, todos los miembros a una se gozan. Pues vosotros sois el cuerpo de Cristo, y miembros en parte”
El sufrimiento nos ayuda a satisfacer las necesidades de los demás a medida que dejamos que Cristo viva a través de nosotros. 2ª a los Corintios 1:3-4 dice:” Bendito sea el Dios y Padre del Señor Jesucristo, el Padre de misericordias, y el Dios de toda consolación, El cual nos consuela en todas nuestra tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquiera angustia, con la consolación que nosotros somos consolados de Dios.”
Nos necesitamos mutuamente porque tenemos algo valioso que ofrecernos los unos a los otros; ya hemos pasado por pruebas, conocemos el valor de la presencia personal de alguien amoroso, hemos experimentado el consuelo de Dios, por lo tanto tenemos capacidad de identificarnos con las personas que pasan por situaciones similares. La Palabra de Dios dice en Gálatas 6:2 : “Sobrellevad los unos las cargas de los otros, cumplid así la ley de Cristo.” Entonces ¿por qué el sufrimiento? Dios nos hizo para depender los unos de los otros: Debemos unirnos, tenemos mucho que ofrecer a los que sufren y los demás tienen mucho que ofrecernos a los que tenemos problemas. Entonces unámonos en un espíritu y experimentaremos un gran consuelo, reconociendo que Dios usa el sufrimiento para alertarnos respecto al problema del pecado, usa los problemas para que nos dirijamos y dependamos de El y puede usar las dificultades para hacernos más semejantes a Cristo. La invitación es que Ud. querido oyente busque a Dios y abra su corazón para que Jesucristo entre en él y pueda confiar junto a otros creyentes en lo que Dios dice en su Palabra en la epístola a los Romanos 8:35 ¿Quién nos apartará del amor de Cristo? Tribulación? ó angustia? ó persecución ó hambre ó desnudez? ó peligro? ó cuchillo? Que Dios le bendiga.

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